INTRODUCCION
La iglesia en el tiempo de los apóstoles, eran muy unida, comían juntos, y se ayudaban uno a otros y no estaban interesados en lo material, a ellos solo les importaba adorar a Dios; lo contrario pasa con la iglesia del siglo XXI, porque hay una tendencia a buscar más lo material que lo espiritual, más el entretener que el edificar, más el hacer sentir bien al pueblo que instruirlo en la verdad de Dios.
Estamos viviendo tiempos difíciles dentro de la iglesia y es que la palabra de Jesucristo se está cumpliendo al pie de la letra. Cuando él dijo en Mateo 24:12 y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará, nos damos cuenta que ya estamos viviendo los últimos tiempos y la iglesia debe estar alerta y velando. Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. Por eso la iglesia debe estar velando o si no nos pasará como a las vírgenes insensatas (Mateo 24:42; 25:1-13).
Por eso Jesucristo nos dejó su Palabra, para que nos preparemos y estemos listos para cuando él venga para irnos a gozar con él al cielo, donde las calles son de oro y el mar de cristal. Por eso les insto a que sigamos adelante en los caminos del Señor, aunque vengan pruebas y luchas, hay que seguir adelante mirando el blanco que es Cristo.
Ya falta poco para llegar a la meta recordemos las palabras que dijo el apóstol Pablo: “No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús” (Filipenses 3:12). Pablo a pesar de lo que él hacia trabajando en ganar almas para él reino de los cielos, declara que no lo había alcanzado todo, pues, hay mucho trabajo que hacer en la obra del Señor.
Sigamos adelante luchando con mucho esfuerzo, sabiendo que nuestro galardón será grande en los cielos (Mateo 5:12). Amén.
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LA NATURALEZA DE LA IGLESIA.
La iglesia dio inicio en el día del pentecostés. En (Hechos 2:1-13), vemos que fue derramado el Espíritu Santo en los cerca de ciento veinte miembros que se encontraban congregados. El libro de Hechos nos enseña como Dios derrama su Espíritu cuando le clamamos de todo corazón.
A lo largo de la historia la naturaleza de la iglesia ha sido definida por cristianos divididos que intentaban establecer la validez de su propia existencia. Durante los primeros siglos los Donatistas de África del Norte se centraron en la pureza de la iglesia y se declararon la única iglesia que representaba el estándar bíblico.
En la Edad Media varias sectas definieron la iglesia de modo que se entendiera que ellas, y no la iglesia católica, eran la iglesia verdadera. Los Arnoldistas enfatizaron la pobreza y se identificaron con las masas; los valdenses acentuaron la obediencia literal a las enseñanzas de Jesús y la predicación evangélica. Los católicos romanos manifestaron ser la única iglesia verdadera.
¿Qué es la iglesia? Hay tres formas de contestar esa pregunta:
1. El vocablo griego usado en el NT para describir la iglesia es ekklesia, que significa “asamblea de llamados”, y este término se aplica: a) A todo el cuerpo de cristianos de una ciudad (Hechos 11:22; 13:1); b) a una congregación local (Romanos 16:5); y c) a toda la iglesia visible de creyentes que han sido lavados con la sangre preciosa de Cristo, cuyos nombres están escritos en el libro de la vida del cordero (Lucas 10:20). La iglesia es entonces una asamblea de personas sacadas del mundo con el propósito que vivan una vida apartada para Dios, y para que sean la sal de la tierra y la luz del mundo. En este sentido, entendemos que no es el gobierno, ni la escuela o universidad los que son llamados a cambiar al mundo sino la iglesia.
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2. Por los nombres que se da a las personas que son parte de la iglesia:
La iglesia es el organismo que reúne a todas las razas, tribus, pueblos, lenguas y naciones, y en cada lugar a los seguidores de Cristo se les da diferentes nombres.
a) Cristianos: Por ser seguidores de Cristo. Se llamó cristianos a los discípulos por primera vez en Antioquía de Siria (Hechos 11:26).
b) Creyentes: Por que la característica que abre las puertas al reino de los cielos es la fe, y cuando alguien la adquiere abre su corazón a Cristo y se convierte en un creyente que puede agradar a Dios (Hebreos 11:6)
c) Santos: La santidad es un concepto desconocido para el hombre natural, porque para él las cosas espirituales le son locura; pero para los hijos de Dios este concepto es muy importante, porque significa separado para el servicio exclusivo de Dios.
d) Escogidos: El concepto de ser escogidos de parte de Dios, es que el llamado y la oportunidad es para todos, pero no todos echan mano de esa oportunidad, por eso a los que creen se les llama escogidos.
e) Discípulos: Esto quiere decir que somos alumnos que estamos siendo instruídos por maestros que nos dan una preparación espiritual.
f) Los del Camino: Así se les llamó al principio a los creyentes por el estilo de vida que adquirían al convertirse a Cristo. El cristianismo no es una religión sino un nuevo estilo de vida, y debido a eso se reconocía que sus vidas eran distintas al resto del pueblo.
g. Hermanos: Por ser una hermandad, donde se entiende que todos so-mos hijos del mismo Dios, y que no hay nadie que tenga otro título dife-rente, ya que Dios no tiene sobrinos, ni nietos, etc., entonces la iglesia es una familia espiritual, donde ninguno es extranjero ni advenedizo sino conciudadano de los santos, y miembros de la familia de Dios (Gálatas 3:26-29); (Efesios 3:19).
La iglesia es entonces por la vocablos que describen a los creyentes, el cuerpo de Cristo, el cual está formado por todos los creyentes de todos los pueblos y naciones bajo el cielo.
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3. Por los vocablos que ilustran a la iglesia:
Los vocablos que ilustran a la iglesia son tres: El cuerpo de Cristo, el templo de Dios y la esposa de Cristo.
“El Cuerpo De Cristo”
La iglesia es el cuerpo de Cristo, porque representamos la presencia de Cristo aquí en la tierra. El es la cabeza, nosotros su cuerpo; no somos la iglesia la que dirige la construcción del edificio, Cristo dijo: “Y sobre esta roca edificaré mi iglesia” (Mateo 16: 18), entendiéndose que es de arriba que viene la dirección y las órdenes para el buen funcionamiento de su cuerpo.
Siendo el cuerpo de Cristo, debemos pensar que él necesita las manos para sa-nar a los enfermos, los pies para buscar a los perdidos, la boca para hablar de su Palabra, y todos los órganos son útiles para Dios, no hay ninguno que esté de-más o que esté de adorno (Romanos 12:4-5).
“El Templo De Dios”
El templo es la casa de Dios donde el pueblo se congrega a dar adoración a Dios, pero el vocablo se usa para indicar que cuando invitamos Cristo a entrar a nuestra vida, nuestro cuerpo se convirtió en templo y morada del Espíritu Santo. Pablo les dice a los corintios: ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíri-tu de Dios mora en vosotros? ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
Por tanto, la iglesia de Cristo es diferente a cualquier otra organización, ya que Dios ha puesto en ella su tesoro, como dice: Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros. La iglesia necesita cada dia buscar a Dios, para que no se apague el fuego del pentecostés en el cual nació, y pueda ser una iglesia gloriosa, como Cristo anhela presentársela a sí mismo: Una iglesia gloriosa que no tenga mancha ni arruga, ni cosa semejante sino que fuese santa y sin mancha (2Co 4: 7; Ef 5:27).
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“La Esposa de Cristo”
De las tres ilustraciones de la iglesia, solamente la figura del esposo y la esposa tiene una significación profética. En contraste con Israel, que fue la esposa infiel de Jehová, la iglesia es representada en el Nuevo Testamento como la virgen pura que espera la venida de su Esposo (2Corintios 11:2). Cristo como el Esposo ya es presentado en Juan 3:29, por Juan el Bautista.
La iglesia de Dios es como la esposa, está sujeta a su esposo, dice en Efesios 5:21: Someteos unos a otros en el temor de Dios. Quiere decir que la iglesia como esposa de Cristo debe someterse a la autoridad y temor de Dios, lo cual es imprescindible para que pueda el esposo y la esposa estar de acuerdo, y poder caminar juntos (Am 3:3).
Como el marido es cabeza de la mujer, así es Cristo cabeza de la iglesia y por lo tanto, debemos hacer lo que Dios nos manda (Efesios 5:23). Dios anda buscando una iglesia que este preparada con su lámpara encendida y con sus vasijas llenas de aceite, lista para encontrarse con su esposo que es Cristo Jesús (Mateo 25:1-13), de lo contrario, la esposa que no esté preparada se quedará a sufrir aquí en la tierra donde será el lloro y el crujir de dientes, cuando Cristo venga por su esposa que se ha preparado (Mt 25:10).
Dios le ha concedido a la iglesia que se vista de lino fino, blanco y resplandeciente, y para seguir resplandeciendo hace falta que haya un compromiso de parte nuestro para serle fiel al Señor. Dice en Apocalipsis 19:7, gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado. Así es como Dios quiere a su iglesia: preparada para su venida. Note que el lino fino dice el texto son las acciones justas de los santos.
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“LA IGLESIA QUE BUSCA LA EXCELENCIA”
Dios busca una iglesia que busque la excelencia, por lo cual entendemos que es tiempo de buscar de Dios y recordar lo que dice la Biblia “porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir.” (Hebreos 13:14) . L a excelencia se alcanza cuando no nos conformamos a la vida superficial o a vivir un cristianismo nomina sino que buscamos el ser mejores cada dia.
La palabra de Dios dice “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” (Mateo 6:33). Hay que recordar que el mejor lugar para el cristiano donde debe hacer tesoros es en el cielo “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.” (Mateo 6:19- 20).
La iglesia de Cristo es llamada a a una vida de excelencia, en la cual el amor fraternal debe ser el distintivo como hijos de Dios: “Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros. (1 Juan 4:11). Asimismo, hay que atender el llamado que Pablo le hace a la iglesia de Corinto al decirles: “Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y un mismos parecer (1 Co 1:10).
La iglesia nació en el fuego del pentecostés y antes que Cristo venga por su iglesia se encenderá el fuego de la última cosecha de almas; por lo cual tenemos que prepararnos para recibir una gran cosecha de almas.
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“Una Iglesia Que Ora”
La oración es vital en la iglesia, porque esta es como el aire que respiramos. Los primeros cristianos oraban todos los días, y por eso era que Dios manifestaba su poder. Dice la Biblia que Pedro y Juan subían al templo a orar a la hora de la oración (las tres de la tarde), y hallaron a un cojo de nacimiento el cual esperaba recibir algo de ellos, pero Pedro le dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. El hombre se levantó y entró al templo alabando a Dios.
A través de la oración recibimos bendiciones: “Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis” (Mateo 21:22), tenemos promesa de Dios si oramos con fe creyéndole, él se glorificará, porque nada hay nada imposible para Dios (Lucas 1:37).
“Una Iglesia Amorosa”
Los primeros cristianos aparte de ser hermanos tenían comunión, eran amigos los cuales comían, oraban, cantaban y predicaban estando unánimes juntos todos los dias y el Señor añadía cada dia los que habían de ser salvos (Hch 2:47). Cristo dijo: En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros (Jn 13:35).
Ese amor entre hermanos hay que cultivarlo y cumplir el mandato del Señor cuando dijo: Esto os mando: “Que os améis unos a otros” (Jn 15:17). El amor es el vínculo perfecto y la principal de las tres virtudes de los hijos de Dios, juntamente con la fe y la esperanza. Pero el mayor de ellos es el amor, porque el amor hace la diferencia; todo aquel que ama ha conocido a Dios, porque Dios es amor.
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“Una Iglesia En Santidad”
Santidad es separado, puesto aparte, consagrado, y el término hebreo es kadosh que significa puro, física, ritual y, especialmente, moral y espiritual. Es decir, que debemos separarnos del mundo para no contaminarnos con las inmundicias del pecado, tenemos un ejemplo en Daniel que el decidió no contaminarse con la comida del rey, y pudo vivir una vida agradable a Dios. La Biblia dice: Así que, amados, puesto que tenemos promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios (2 Corintios 7:1).
Dios anda buscando una iglesia gloriosa: “a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha” (Efesios 5:27). El término santidad significa: separado; ¿de quien me debo separar? Del mundo, del pecado, del diablo y de toda la corriente que es contraria a la voluntad de Dios. Recordemos que sin santidad no veremos al Señor Jesús: Seguid la paz con todos y la santidad, la cual nadie verá al Señor (Hebreos 12:14).
Dice la Biblia: El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía. Y bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad.
La santidad es un asunto de identidad con Dios, ya que anhelamos ser como él es; porque escrito está: “Sed santos, porque yo soy santo” (1 P 1:16).
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“EL CULTO EN EL TEMPLO”
EL culto de la iglesia es muy importante para el creyente porque es el lugar donde Dios nos ha dado promesa: En todo lugar que yo hiciere que esté la memoria de mi nombre, vendré a ti y te bendeciré (Ex 20:24b), así que el que quiere bendición hay que venir con regocijo y con alegría a contemplar la hermosura de Jehová, y a inquirir en su templo. El culto también implica el congregarnos, y la palabra de Dios nos insta diciendo: “No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre” (Hebreos 10:25).
“La Cena Del Señor”
El participar de la cena del Señor es un mandato para la iglesia (Hechos. 20:7), "para partir el pan", y hacer memoria del sacrificio que hizo nuestro Señor Jesucristo en la cruz del calvario y es necesario que todo aquel que ha sido bautizado y que tiene cargos en la iglesia debe participar en este acto de reverencia; también dice que cuando tomemos la cena del Señor cada uno debe examinarse a si mismo (1 Corintios 11:28). La práctica de esto lo tenemos que hacer hasta que Cristo venga (1 Corintios 11:26).
Debe observarse dignamente, esto es, discerniendo el cuerpo del Señor y el significado de los elementos contenidos en la cena (1 Corintios. 11:27-29). El pan que es partido simboliza el cuerpo de nuestro Señor Jesucristo que fue molido por nuestro pecados, y el jugo de la vid, simboliza la sangre del nuevo pacto que fue derramada en el calvario para el perdón de todos nuestros pecados.
Así que, el participar en la cena no es una opción sino un mandato y un privilegio.
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“La Música En El Culto”
La música tiene su lugar y propósito en el culto de la iglesia. Este lugar y propósito han sido creados por la autoridad divina, en tal lugar y propósito debemos reconocer la importancia de: (1) la clase de música autorizada; (2) el propósito para el cual servirá la música; y (3) la manera en la cual la música debe ser ofrecida.
Las Escrituras del Nuevo Testamento autorizan el canto . "Y cuando hubieron cantado un himno, salieron (Mateo. 26:30). Como a la media noche Pablo y Silas estaban orando y cantando himnos a Dios (Hechos. 16:25), es decir, que en esos tiempos con instrumentos o sin ellos adoraban a Dios con todo su corazón; sin embargo, la utilización de instrumentos es algo que lo encontramos desde el Antiguo Testamento en el libro de los Salmos.
El propósito del canto es Alabar y dar gracias a Dios (He 13:15; Hch6:25; Stgo 5:13). Es decir, que por medio de la alabanza nosotros podemos decirle al Señor cuanto le amamos y exaltamos su santo nombre.
“Reverencia En La Iglesia”
La reverencia hacia Dios, se debe tener porque él es digno de todo respeto porque dice la Biblia: Jehová está en su santo templo; Jehová tiene en el cielo su trono; Sus ojos ven, sus párpados examinan a los hijos de los hombres (Salmo 11:4) Por lo tanto, él es digno de suprema alabanza. Vemos un claro ejemplo en Jesús cuando los escribas y fariseos habían convertido la casa de Dios en tienda , él los reprendió diciendo: “Escrito está: Mi casa es casa de oración; mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones” (Lc 19:46).
La casa de Dios se respeta cuando nos presentamos con un espíritu quebrantado, reconociendo nuestra necesidad espiritual.
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“LOS VIRUS EN LAS IGLESIAS”
Hoy en día vemos iglesias que parecen computadoras infectadas con diversos virus que la han invadido, estos son algunos: las calumnias, la envidia, el chisme, orgullo, las disensiones, el enojo, la falta de perdón, etc.
“La Calumnia”
La calumnia es uno de los virus que la iglesia va a enfrentar. La calumnia es todo aquello que se levanta en contra de tu persona, cuando tratan de arruinar tu reputación hablando toda clase de mal, mintiendo. La gente se presta para levantar calumnias contra los hijos de Dios, y aun dentro del pueblo de Dios hay hermanos que no están viviendo la vida nueva , donde ya no se le da lugar a las obras de la carne. La palabra de Dios dice: Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos (Mateo 5:12), y también dice: No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal (Romanos 12:21).
Cuando hay calumnias a nuestro alrededor, no hay que desalentarnos; porque eso es señal inequívoca que estás haciendo la obra de Dios. El dia que nadie diga nada de ti, es porque no estás haciendo nada para Dios, pero la calumnia siempre va a ser señal de que estás yendo adelante, y al diablo no le agrada que vayamos en triunfo en Cristo Jesús.
Cristo dijo: Bienaventurado sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. En este sentido, es una dicha que seamos vituperados o calumniados por el nombre del Señor. No te desanimes ni te entristezcas porque Dios es el juez de toda la tierra y él hará una diferencia entre los que le sirven y los que no le sirven.
Gózate.
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“El Chisme”
El chisme es uno de los virus de los virus más dañinos en la iglesia. Dios lo dijo desde el Antiguo Testamento: “No andarás chismeando entre tu pueblo” (Levíticos 19:16), esto implica que no debemos andar chismeando dentro del pueblo de Dios ni afuera del templo para guardar nuestro testimonio, (Proverbios 20:19). El que anda en chismes descubre el secreto; No te entremetas, pues, con el suelto de lengua. Esto quiere decir que para evitar cualquier problema es mejor apartarnos.
Para eliminar ese virus debemos de ser sabios al usar nuestra lengua. El chismear es algo que Dios aborrece, porque el libro de proverbios dice: Sin leña se apaga el fuego, y donde no hay chismoso, cesa la contienda y también dice: Seis cosas aborrece Jehová, y aun siete abomina su alma: El testigo falso que habla mentiras, y el que siembra discordias entre los hermanos (Proverbios 6:16, 19; 26:20), es decir, que el chisme es algo con lo cual no vamos a agradar a Dios. Por lo tanto, no debemos levantar chismes ni tampoco permitir que alguien me traiga chismes que van a sembrar discordias entre los hermanos.
El chisme es un asesino silencioso porque mata sin darnos cuenta, se mata la reputación, el buen testimonio, una vida llena de fruto para Dios, y un corazón dispuesto para hacer la voluntad de Dios. Si un extraño entra a la iglesia y estando dentro él tiene cubierta la cabeza con un sombrero, se le pide que se descubra como reverencia a Dios; nos ponemos en pie como reverencia a la Palabra de Dios, y si alguien enciende un cigarro dentro del templo, los diáconos corren y le piden respeto por la casa de Dios. Pero cada dia alguien enciendo un chisme dentro de la casa de Dios, y en lugar de pedirle respeto, muchos están interesados en oir de que se trata. ¿No será que estamos colando el mosquito, y nos estamos tragando el camello?
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“LA MISIÓN DE LA IGLESIA”
La palabra "evangelismo" viene de una palabra griega que significa "buenas nuevas"; por eso el evangelismo, en consecuencia, es proclamar las buenas nuevas a todo el mundo, lenguas, y nación; y es parte de la gran Comisión que Cristo nos dio.
La iglesia en general tiene una misión el cual Jesucristo nos dejo en su palabra cuando dijo: Por tanto, id, y hacer discípulos todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado, y he aquí, yo estoy con vosotros, todos los días, hasta el fin del mundo (Mateo 28:19).
“El Evangelismo y el discipulado”
La iglesia tiene el trabajo de evangelizar a las personas que no conocen de Dios porque ese fue el mandato de Cristo, y es necesario que el evangelio sea predicado a todas las naciones (Marcos 13:10); es decir, que Dios no quiere que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento (2 Pedro 3:9), y ese es el trabajo de los que ya hemos creído en Dios.
Cristo dijo: Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y "hasta lo último de la tierra (Hch 1:8). Esto fue el mandato para los discípulos pero también para nosotros la iglesia del siglo XXI que se nos encomienda predicar el evangelio a todas las naciones. Por que dice la Biblia: He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega (Juan 4:35). Asimismo después de ganar las almas hay que discipularlos para que crezcan en la fe. Ciertamente es tiempo de segar lo que otros han sembrado.
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“LAS IGLESIAS DEL NUEVO TESTAMENTO”
Las iglesias del Nuevo Testamento fueron estimuladas por su rectitud y también se les reprobó por sus fracasos y sus faltas.
“La Iglesia De Jerusalén”
La iglesia de Jerusalén fue la primera iglesia del Nuevo Testamento, profetizada por Isaías (Isa. 2:2,3). Vemos que Dios tenía en sus planes el formar una iglesia donde su pueblo le adorare. (Lucas 24:46-47) y les dijo: Así está escrito y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día y que predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecado. “El arrepentimiento y la remisión de pecados fue predicado y comenzando en Jerusalén”
La iglesia de Jerusalén, debe de ser el modelo para muchas iglesias en este siglo en respetabilidad: "teniendo favor con todo el pueblo (Hch. 2:47). inspiraron respeto aun a sus enemigos.
“La Iglesia de Antioquía de Siria”
La iglesia de Jerusalén por causa de las persecuciones y de la muerte de Esteban se dispersó y predicó a Jesús en Antioquía (Hechos. 11:20). "Gran número creyó y se convirtió al Señor". Y es por eso que la iglesia crece como resultado de sus exhortaciones (Hch 11:23,24). Y después Bernabé al ver los frutos que Dios estaba dando busco la ayuda de Pablo en Antioquía (Hch 11:25,26). Continuaron trabajando juntos por un año. Y ahí fue donde por primera vez se les llamo a los discípulos cristianos. Y la iglesia de Antioquía fue la primera iglesia local integrada por judíos y gentiles en general (Hch 15:23) ¿Dónde puede hallarse el mejor de una iglesia que cumple sus obligaciones en la localidad y fuera de ella? Sin duda que en la iglesia de Antioquía de Siria que fue la iglesia misionera que envió y sostuvo el ministerio de Pablo y Bernabé.
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“LA IGLESIA QUE SERA ARREBATADA”
Para ir acercándome a la parte final de esta tesis, quiero presentar algunas de las características que debe de tener la iglesia que va ser arrebatada por Cristo, para que estemos atentos y nos esforcemos cada día más.
Primeramente, Cristo nos dice: Esforzáos a entrar por la puerta angosta; porque muchos procurarán entrar y no podrán (Lc 13:24). Este pasaje nos presenta dos formas en que los seguidores de Cristo adoptan en el camino del Señor.
La primera es la forma en la que Cristo quiere que sus discípulos caminen: Esforzándose por entrar por la puerta angosta. Sin esfuerzo, la iglesia no logrará entrar por la puerta.
La segunda la encontramos en Lucas 10:20: Nuestros nombres deben estar escritos en los cielos. El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios, y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con é seamos glorificados.
La tercera para todos los que perseveren hasta el fin. Cristo dice: Mas el que persevere hasta el fin, este será salvo. La perseverancia es indispensable para los hijos de Dios, no podemos darnos por vencidos, no podemos retroceder, no podemos retirarnos, porque ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado. Y también el que lucha no es coronado si no lucha legítimamente.
Por tanto, hay que esforzarnos para entrar por la puerta angosta, hay que asegurarnos que nuestros nombres estén escritos en los cielos y hay que perseverar hasta el fin.
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CONCLUSIÓN
Si nos damos cuenta la iglesia ha ido cambiando al pasar de los años em pezó bien con la iglesia de Jerusalén porque todos se amaban, comían el pan juntos, oraban juntos, y eran edificados. Esto hizo de la iglesia de Jerusalén una iglesia que cuando oraban la casa donde estaban reunidos tembló (Hch 4:31).
Dios busca una iglesia que ore, una iglesia en santidad. Pablo les dice a los tesalonicenses: Orad sin cesar. En Hebreos 12:14, dice: Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Vemos que pablo no exhorta a andar en santidad y también dice la Biblia: sino, que como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir. ¿Y como hemos de santificarnos? Lavando vuestras ropas cada día como dice en Apocalipsis 22:14: Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derechos al árbol de la vida. Así que si queremos ir a gozar con Dios en la nueva Jerusalén debemos santificarnos cada día.
Algo muy importante que hay que observar acerca del culto en la iglesia es que es muy importante la reverencia dentro de la casa del Señor. La cena del Señor es un mandato de Dios para que todos participemos, porque ahí recordamos el sacrificio que Jesucristo hizo en la cruz del calvario por todos; también la música toma un papel muy importante en el culto porque los músicos son ministros encargados de llevar la alabanza, y dirigirla a Dios con olor grato y fragante.
En las iglesias del siglo XXI siempre van a ver virus pero para que esos virus sean removidos de las iglesias tenemos que poner nuestro antivirus que es Cristo Jesús ¿Cual es ese antivirus? La oración y la intimidad con Dios es el medio por el cual nosotros podemos quitar toda clase de virus de nuestras vidas y para poder ministrar a otros, primero voy a empezar por anhelar el vivir una vida de excelencia en Cristo Jesús. ¡Qué Dios les bendiga hoy y siempre!
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BIBLIOGRAFIA
Biblia De Referencia Thompson Versión Reina-Valera Editorial Vida Undécima impresión, 1995.
Roy E. Cogdill. La iglesia del Nuevo Testamento. en el año (1953)
Autor: Myer Pearlman. Teología bíblica y sistemática, “La iglesia” año (1898-1943)
Autor. Howard F. Breve Historia De La Iglesia Cristiana en el año (1960, 1977)
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